Deseos cumplidos.

Con los pies a remojo mientras pescaban el día les fue ganando terreno, envolviéndolos al atardecer con una fina capa de plancton que fue cubriendo primero los pliegues de la piel y luego el cuerpo entero, salvo sus ojos, que tornaron de un azul anodino a un vivo amarillo, antes de que el plancton se resquebrajara y saltaran al lago dos pequeños alburnos.


Micro relato presentado al concurso "relatos en cadena " de la SER. Frase de inicio: "con los pies a remojo mientras pescaban".

Cuenta atrás...

Los rincones vacíos de la casa ya desmantelada se curan heridas pasadas, respirando silencios contenidos en un eterno duermevela.


De cuando en cuando, un golpe seco que solo ellos consiguen oír agita sus miedos, que al mezclarse con el aire forman una fina escarcha que traspasa el suelo, haciendo temblar los cimientos, y avivando la grieta del tabique que oculta el armario donde fue encerrado.  


Micro relato enviado al concurso relatos en cadena, de la SER. Frase de inicio: "Los rincones vacios de la casa ya desmantelada"

Reseña de "La inquilina de Wildfel Hall", de Anne Brontë.

Hoy quiero hablaros del último libro que he leído, “la inquilina de Wildfel Hall”, de Anne Brontë.



1.- Ficha bibliográfica.

La inquilina de Wildfell Hall es la segunda novela de la autora inglesa Anne Bronté.
Fue publicada por primera vez en 1848 bajo el seudónimo de Acton Bell; siendo considerada como una de las primeras novelas feministas de la época.

2.- Presentación.

La novela, de formato epistolar, narra la historia de Helen Graham, una misteriosa mujer que llega a la vieja mansión de Wildfel Hall con su hijo Arthur y su inseparable criada Rachel. Pese a su reticencias iníciales por socializar con sus vecinos, poco a poco se va dando a conocer entre estos, sobre todo con Gilbert Markham, que posteriormente conocerá el oscuro pasado de la dama.

3.- Información de la autora.

Anne Brontë  nació en Thorton, Yorkshire del Oeste; el 17 de enero de 1820.
Fue una novelista y poetisa británica, la más joven de la familia Brontë, autora de dos novelas que hoy son clásicas de la literatura inglesa, como la que en esta entrada estamos comentando, y Agnes Grey, publicada en 1847.

La más pequeña de cinco hermanos, tres chicas y dos chicos. Las hermanas fueron prolíficas en la escritura, y en cierto modo, la familia fue parte de la inspiración de estas. Los problemas de alcoholismo de Brandon, el hermano pequeño, fueron parte de la inspiración para esta novela, cuyo segundo pilar seria la violencia de género.

4.- Argumento.

La historia comienza a narrarse a través de las cartas que uno de sus protagonistas, Gilbert Markham, escribe a su amigo Halford, relatando la llegada a Linden Car de una joven viuda, Helen Graham, que se aloja en la vieja mansión de Wildfel Hall.

Pese al afán de la viuda por pasar desapercibida, acaba conociendo a la mayoría de los habitantes del condado de Linden Car, incluido a Gilbert, que tras un rechazo inicial, se enamorará desesperadamente de  Helen, lo que supondrá un problema más para la viuda y su misterioso pasado. 

Ante el cariz que toman los acontecimientos, Helen entregará a Gilbert su diario personal, en el que podrá leer el pasado de la Señora Graham, y las razones que la han traído a Wildfel Hall.

5.- Personajes.

Helen Graham.

Nuestra protagonista es una bella joven que no pasa desapercibida para ningún hombre. Su llegada a Wildfel Hall se produce con un cierto halo de misterio, siendo además su deseo seguir en el anonimato el mayor tiempo posible. Tras conocer, con el tiempo, a la mayoría de los habitantes de linden Car, los rumores sobre su pasado acaban pasando factura a su relación con Gilbert, con el que no le quedará otro remedio que sincerarse a través de su diario.

Gilbert Markham.

Joven Hacendado del condado de Linden Car. Vive en su hacienda junto con su madre, su hermano Fergus y su hermana Rose. La llegada de la inquilina de Wildfel Hall cambia su vida por completo, enamorándose de ella hasta la desesperación.

Arthur Huntington

Uno de los errores del pasado de Helen, y en parte, el culpable de su huida a Wildfel Hall. Un joven tan guapo como díscolo, y tan alcohólico como mujeriego.

Federick Wilson.

Hermano de Helen. Ayuda a la protagonista en su traslado a Wildfel Hall, y se convierte, de manera casual, en el confidente y mejor amigo de Gilbert Markham.

6.- A quien va dirigido el libro.

En principio a todo aquel al que le guste la buena literatura, ya que, según dicen los que entienden de esto, entre los que no me incluyo; hay que leer siempre algo de cada estilo.

Y desde un punto de vista más técnico, el libro es un clásico de la época victoriana, donde los sentimientos están expresados hasta el último aliento, y donde los personajes y las escenas se presentan con gran detalle.

El libro describe fielmente los vicios de una sociedad influida por el patriarcado, donde se solían pactar los matrimonios entre los padres, y donde los hijos, y sobre todo las hijas, tenían poco o nada que decir. Por el tono de la narración, parece que nuestra autora quiera poner una lupa sobre todos estos errores del pasado, incluido el alcoholismo, donde la autora pudo inspirarse en los problemas de su hermano pequeño.

7.- Opinión personal.

De entrada el formato del libro, en tono epistolar, me llamó la atención. Me resulta una manera muy original de contar una historia, reconociendo además que la autora se ha manejado bastante bien en un tono en el que no es nada fácil de narrar.

Más o menos a mitad del libro la historia, narrada a través de cartas, pasa a ser contada a través del diario personal de la Señora Graham. Me parece un acierto, y un giro que hace aumentar la atención del lector.

El lenguaje es sencillo pero muy cuidado. Las descripciones, extensas, quizá demasiado, y esto contribuye a que la novela pues hacerse larga en algunos momentos, pero eso es algo de lo pecan muchos autores que dominan el género en el que escriben.

Los personajes principales quedan muy bien definidos, hasta el más mínimo detalle, que quizá se pierde un poco en la de los secundarios, donde la verdad, no hace falta.

La historia transcurre en un ritmo razonable, con un par de giros bien cuidados y quizá un poco, solo un poco previsibles, y por poner un pero, creo que el final se podía haber acortado un poco más, no haciendo falta cerrar el círculo de los personajes secundarios.


En definitiva, un libro muy recomendable para los que les guste la época victoriana, y para los que no hayan leído a las hermanas Brontë.