Micro relato para REC. Prueba de ingreso.



Un señor con levita que se parece a Puskin, una vieja que se mueve con andador y un niño gordo que come donuts de dos en dos. Es lo que hay. En ese sobre tienes todas las indicaciones. Elige uno y recuerda, que sea rápido y limpio.  Hay otros dos esperando fuera. 

Procesada la orden, el aspirante templó sus nervios preparando el equipo, se sentó junto a la ventana y comenzó a esbozar los primeros trazos del retrato robot. 


Micro relato para REC. La guarida de la amantis.

El puñetero ojo de la cerradura no pierde detalle de un rito ceremonioso que se repite una y otra vez en el espejo del techo, y cuyas brasas aun ardientes se recuestan en la cama ávida de deseos carnales.


Poco después, el sexto peldaño de la escalera se hundirá de nuevo, y en la caída, el suelo del rellano cederá voluntariamente, mostrando los clavos afilados donde yacen las almas de esos infelices que un día creyeron estar enamorados de ella.