Un señor con levita que se parece
a Puskin, una vieja que se mueve con andador y un niño gordo que come donuts de
dos en dos. Es lo que hay. En ese sobre tienes todas las indicaciones. Elige
uno y recuerda, que sea rápido y limpio.
Hay otros dos esperando fuera.
Procesada la orden, el aspirante
templó sus nervios preparando el equipo, se sentó junto a la ventana y comenzó
a esbozar los primeros trazos del retrato robot.
Wow que inquietante! Fíjate que pensaba que le iban a encargar rl asesinato de alguno de ellos pero...me has sorprendido. Felicidades.
ResponderEliminarAbrazotes
Bueno,la idea era darle una vuelta de tuerca al final, ya que de lo contrario me hubiese quedado demasiado plano el relato.
EliminarMe alegra que te haya gustado.
Saludos.