La vida en un
segundo.
Subir de nuevo a la habitación. Volver
a besarla. Pasar la noche con ella; y el día anterior, y el otro, y el otro. La
boda. El anillo. El primer beso junto a la puerta del bar de siempre, y esa
mirada que lo dijo todo. El primer apretón de manos. El último examen. Los
nervios. Las sonrisas. Las bromas. Los juegos que no acaban. Una tarta con
cinco velas. Ellos. Ella. Su abrazo. El sonido de su corazón. El golpe. Nada.
Uyyy que final!! Me ha gustado Alfonso.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Gracias Nani. Realmente el final y el principio se dan, desgraciadamente para el protagonista, la mano en este relato.
EliminarUn saludo.
Uaaah! Alfonso. Me has dejado relamiendo esos retazos de vida, jugando a rellenar los espacios vacíos.
ResponderEliminarMuy bien. Felicidades!
Abrazos.
Gracias Miguel, me alegra que te haya gustado esta retrospectiva. Quizá me quedó corta, pero las normas son las normas.
EliminarUn saludo.
Que bonito , me ha gustado mucho, me quedo siguiendote y te invito a mi blog, besitos y nos leemos;)
ResponderEliminarhttp://estoyentrepaginas.blogspot.com.es/
Gracias por la visita y por quedarte por aquí Cristina.
EliminarEnseguida te devuelvo la visita.
Un saludo.
Una regresión que da vértigo. Excelente idea.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Rafa.
EliminarUn saludo.
¡Qué bueno, Alfonso! Probablemente, de lo mejorcito de lo que te he leído. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarGracias Izaskun. Me alegra mucho leer tu comentario. A veces pienso que me diluyo un tanto entre mis propias letras, y comentarios como el tuyo siempre reconfortan.
EliminarUn saludo.