Esperando que mas pronto que tarde, dejes de llorar por él, te mantengo abrazada durante el resto del trayecto, alejándome todo lo que puedo del borde de la barcaza. Antes de embarcar nos advirtieron de los riesgos de viajar de noche, y que bajo ningún concepto se regresa a por los caídos.
El brillo de las luces en la
costa nos llena de esperanza. Sin embargo, los de allí se muestran serios y
distantes en nuestro desembarco.
—Póntela, por favor, —me dice
una chica ofreciéndome una mascarilla— las cosas están difíciles por aquí.
Y al recoger la mascarilla me pregunto
qué entenderán aquí por dificultades.
Imagen de Manolo
Franco en Pixabay
Micro relato enviado al concurso "Relatos en Cadena", de la ser. Frase de inicio: "Esperando que mas pronto que tarde, dejes de llorar por el"
Muy bueno Alfonso. Ese final es genial!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Creo, Nani, que en este caso el título lo dice todo. Por muy mal consideremos que podemos estar, siempre hay alguien que está peor.
EliminarSaludos.
Hay tantos mundos dentro de otros mundos...
ResponderEliminarMuy bueno, felicidades.