Vida de ensueño busca inquilina...


Le obligaron a sentarse en el sofá junto a los zapatos de charol rojos con doble hebilla y su oso de peluche blanco. A su lado, su padre se mecía el cabello rubio sin ocultar cierto interés en la puerta de entrada, y el gran danés mantenía su pose elegante, aunque relajada, en el suelo de una casa señorial de techos altos y un jardín tan amplio como luminoso, capaz de plegarse una y otra vez hasta adecuarse al tamaño de un suspiro hecho deseo ante un diente de león.


Micro relato enviado al concurso "Relatos en Cadena", de la SER. Frase de inicio: Le obligaron a sentarse en el sofá junto a los zapatos"


2 comentarios:

  1. Fabuloso giro final, pura lírica.
    Enhorabuena.
    JM

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    1. Me alegra que te haya gustado, Juan Manuel.

      Un abrazo.

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