-Como un
bigote a lo antiguo, debajo de la nariz. Cualquier otro lugar queda ya a muchos
saltos de aquí, Señor.
-¿Qué opciones tenemos, teniente?
-Aquí en la base hay cada vez
menos pelos. El traslado es prioritario.
-¿Hay noticias de la brigada de
reconocimiento?
-Sí Señor, nos acaba de llegar su
informe. Al parecer la zona es inestable; y en los últimos días se han sucedido
intensas tormentas de nieve seguidas de fuertes temblores. Hemos perdido a
varios de los nuestros por las fuertes succiones hacia la nariz. Pero hay
esperanza Señor, ya que, tras la última tormenta, la más fuerte que recuerdan,
todo ha quedado en calma.
Jajaja Alfonso. Muy original y simpático tu micro, ¡qué imaginación chiquillo!!
ResponderEliminarSuerte para la próxima.
Besicos muchos.
Je je; pues si Nani, esta semana me dió por hacer grandes a esos pequeños insectos de tan mal recuerdo para nuestra infancia.
EliminarMe alegra que te haya gustado.
Un saludo.
Qué bueno, Alfonso. Lo de ese ejército es superior. Enhorabuena por el rato de risa que he tenido.
ResponderEliminarUn saludo
JM
Muchas gracias Juan. Me alegran esas risas...
EliminarSaludos.
Halaa este si que es un despiojo en toda regla, Alfonso, ja,ja,ja. Ahora los aireas un poco y a ver hacia donde caen ;) Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Eva, con estos aires del "casi otoño" pueden llegar a cualquier lado.
EliminarUn saludo y gracias por pasarte.
jajaja, qué bueno,
ResponderEliminarUn gran ejército, sí señor.
Y con un gran afán de supervivencia vaya...
EliminarGracias por la visita Elena.
Saludos.
Me encanta leerte en tanta multiplicidad de registros. Me he reído mucho y aplaudo ese toque surrealista que le has dado hablando al compás del orden cerrado del ejército. Aunque me queda la duda si esa calma final en realidad es una calma definitiva. Ya me dirás. Como siempre un abrazo, amigo :)
ResponderEliminarRealmente Juan Antonio, esa calma final (sobredosis) es una calma definitiva. Quizá no lo pude expresar todo lo bien que hubiese querido, pero esas tormentas de nieve y viento eran en realidad los momentos en los que el habitáculo de los piojos tomaba sus dosis...
EliminarUn tanto rebuscado quizá, no se...
Un abrazo amigo.
Coincido con Juan Antonio. Aparte de encantarme tu multiplicidad de registros, me da una enviiiiiiiidia (sana) que no veas ;-)
ResponderEliminarVaya Vicente, veo que te pasa lo mismo que al amigo Juan Antonio, y es que me lees con "buenos ojos".
EliminarYo mas que envidia, tengo cierta admiración por plumas como la tuya, que exhibes semana a semana para disfrute de los que te leemos.
Un abrazo.
Muy imaginativo y divertido, Alfonso. Creo que esta vez no te han premiado "por los pelos". Otra vez será, que creatividad desde luego no te falta. Saludos
ResponderEliminarGracias Juana; como suelo decir siempre, se hace lo que se puede, aunque no siempre es lo suficiente para esos jueces. Esta semana la verdad es que el nivel estaba muy alto.
EliminarHabrá que seguir intentandolo.
Saludos.
Muy original tu despiojo. Enhorabuena.
ResponderEliminarAhora nos toca airearnos. Suerte.
Pues si Piel, yo ya he puesto a airear a un "antihéroe" muy particular. Me da que saldrá despojo, pero bueno, nunca se sabe.
Eliminarjajajaja ¡qué divertido!, pues empieza la temporada con el comienzo del colegio, muy apropiado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenas campeona. Felicidades. A por esa final mensual. La verdad es que mi relato salio en la época mas apropiada, cierto.
EliminarGracias por la visita. Saludos.
Creo que un buen título o seudotítulo hubiese sido Despiojo, como creo que ya te han dicho por ahí arriba.
ResponderEliminar¡Ay! Alfonso, que me has hecho reir y me ha parecido de gran ingenio. Sigue así... que tengo ganas de escucharte por la radio. Un besazo amigo.
Cierto Laura, este micro es un "despiojo" en toda regla.
EliminarLo de escucharme por la radio està muy caro, pero ganas no van a faltar.
Un abrazo.
Me encanta, Alfonso. Qué divertido y original giro para una frase de inicio con tanto carácter.
ResponderEliminarUn besote.