Micro. La imagen de lo que fui.



Os dejo mi aportacion para el concurso del mes de Febrero en el blog de “esta noche te cuento”. 

Podeis ver la entrada con el relato en el blog en el siguiente enlace:


Aún sin saber muy bien porque sigue colgando de la pared del salón lo cierto es que su sola presencia es como un analgésico para mi maltrecha conciencia, un espejismo, un retazo de lo que fui y ahora no soy; y un anhelo de esperanza en la desencantada existencia por la que deambulo. 

Cuando lo veo recuerdo lo que era, una persona con un camino bien trazado que decidí abandonar, como un barco bien dirigido que quedo varado y se hunde sin remisión.

Movimientos autómatas me ajustan la corbata mientras repaso la agenda del día. Despedir personas hace años que no me produce remordimiento alguno; da igual su situación, hijos, edad. La escarcha que desde hace tiempo rodea mi corazón hace que cualquier sentimiento de culpa resbale y me sea indiferente; casi ni oigo sus lamentos. Supongo que por eso soy bueno en este trabajo.

Al salir, antes de cerrar la puerta, otro automatismo en forma de última mirada, dejando lo mejor de mí, lo único bueno, dentro, colgando de ese retrato de lo que una vez fui y nunca más seré.

4 comentarios:

  1. Nunca se sabe, si se siente tristeza al mirar lo que se fue, es que no todo está perdido.
    Perra vida.

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  2. Cierto Ana, de eso trata el relato, de ese retrato que se mantiene colgado como la esperanza de un cambio que no llega.

    Un saludo.

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  3. ¡Buen trabajo, Alfonso!

    Una pieza que transita por el lado amargo de la vida del protagonista; no ya el de la insatisfacción, sino el de defraudarse a sí mismo.

    Un abrazo,

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  4. Gracias por el comentario Pedro, en cierto modo el relato trata de mostrar eso, la intrascendente vida de un alma desdichada.

    Un saludo.

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